La revista médica de la Asociación Médica Británica, The BMJ, publicó reciente un estudio sobre el cómo la infertilidad, la pérdida gestacional y la mortinatalidad pueden aumentar el riesgo posterior de las mujeres de sufrir un ictus mortal y no mortal.
"Hasta la fecha, múltiples estudios han generado un creciente cuerpo de evidencia sobre la asociación entre las complicaciones del embarazo (diabetes gestacional y preeclampsia) y el riesgo a largo plazo de ictus, pero los estudios sobre las asociaciones con la infertilidad, el aborto espontáneo o la muerte fetal han producido resultados mixtos", explicaron Chen Liang, candidato a doctorado en la University of Queensland, Brisbane, Australia, y sus colaboradores.
En el estudio se incluyeron 618, 851 mujeres de 32,0 a 73,0 años de edad al inicio del estudio con datos sobre infertilidad, aborto espontáneo o muerte fetal, al menos un evento de resultado (accidente cerebrovascular no fatal o fatal) e información sobre covariables.
Los principales resultados y medidas arrojaron que los accidentes cerebrovasculares no fatales se identificaron a través de cuestionarios autoinformados, datos hospitalarios vinculados o registros nacionales de pacientes. Los accidentes cerebrovasculares fatales se identificaron a través de los datos del registro de muertes.
Los investigadores llegaron a la conclusión de que una historia de abortos espontáneos recurrentes y muerte o pérdida de un bebé antes o durante el parto, podría considerarse un factor de riesgo específico femenino para el accidente cerebrovascular, con diferencias en el riesgo según los subtipos de accidente cerebrovascular.
Estos hallazgos podrían contribuir a mejorar el control y la prevención de accidentes cerebrovasculares en mujeres con este tipo de antecedentes.