En un emocionante avance médico, una niña de ocho años se convierte en la primera paciente en el Reino Unido en someterse a un trasplante de riñón sin necesidad de tomar medicamentos inmunosupresores de por vida para prevenir el rechazo del nuevo órgano. Este increíble logro fue posible gracias a un proceso especial llevado a cabo por médicos especialistas del Hospital Great Ormond Street de Londres.

La pequeña Aditi Shankar, quien sufría de una rara condición genética llamada inmunodisplasia ósea de Schimke, la cual afectaba su sistema inmunitario y sus riñones, recibió el trasplante de riñón de su propia madre después de un tratamiento pionero. Primero, Aditi fue sometida a un trasplante de células madre, lo que permitió que su cuerpo aceptara el nuevo riñón como si fuera propio, ya que tanto la médula como el órgano donado provenían de su madre.

Los medicamentos inmunosupresores, que generalmente se requieren de por vida después de un trasplante de órgano, conllevan riesgos significativos de infecciones y otras complicaciones. Sin embargo, en este caso, Aditi dejó de tomarlos apenas un mes después de la cirugía, gracias a la innovadora técnica desarrollada por el equipo médico del Hospital Great Ormond Street.

Aditi había luchado contra su condición desde los cinco años, pasando largos períodos en el hospital para recibir tratamiento de diálisis. El deterioro de su función renal la llevó a necesitar un trasplante, aunque en un principio se consideraba que su sistema inmunológico estaba demasiado debilitado para ello.

El tratamiento desarrollado por el hospital implicó un mes de hospitalización durante el cual se le realizó un trasplante de médula y se le sometió a diálisis continua las 24 horas del día. Seis meses después, en marzo de 2021, Aditi estaba lista para recibir su nuevo riñón.

El doctor Stephen Marks, especialista en riñón pediátrico en el Hospital Great Ormond Street, líder del programa de trasplantes en ese centro, destacó que Aditi es la primera paciente en el Reino Unido en someterse a un trasplante de riñón que no requiere medicación inmunosupresora después de la cirugía. Este logro asombroso ha corregido la deficiencia en el sistema inmunológico de la niña, permitiéndole llevar una vida normal, asistir a la escuela y disfrutar de actividades como nadar, cantar y bailar.

Este hito médico representa un avance significativo en el campo de los trasplantes de órganos y ofrece esperanza a pacientes con condiciones similares en todo el mundo. El equipo del Hospital Great Ormond Street ha demostrado cómo la innovación y la determinación pueden cambiar vidas de manera extraordinaria.

Fuente EFE.