La Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) autorizó el primer sistema de resonancia magnética portátil del mundo, diseñado para ser llevado a la cama de un hospital para escanear la cabeza y el cerebro de un paciente.

Este sistema de imágenes fue desarrollado por Hyperfine Research para personas de dos años en adelante. El mismo funciona con una toma de corriente diaria para crear imágenes de contraste clínico y renderizados en 3D.

Asimismo puede controlarse a través de una tableta inalámbrica como un iPad de Apple.

El dispositivo de punto de atención pesa aproximadamente una décima parte de un sistema de resonancia magnética fija convencional. Además de que tiene aproximadamente tres pies de ancho y cinco pies de alto lo que permite que quepa en un elevador.