Autora: Dra. Beatriz Adriana Villanueva Collins
Los niños deben empezar a edad temprana los cuidados de higiene en sus dientes y para eso es necesario en primera instancia, que los padres les fomentemos, como parte de su educación, el cepillado de sus dientes después de ingerir alimentos.
La primera dentición (dentición temporal o dientes de leche) requiere los mismos cuidados que la dentición permanente y por esto, es importante entender que los primeros dientes tienen las mismas funciones que los dientes permanentes, sumando que sirven de guía importante para la erupción de los dientes permanentes, por ello, ambos tienen que tener los cuidados rutinarios de higiene.
Dentro del tema de prevención se incluyen los cuidados que requieren los maxilares en cuanto a su crecimiento aplicando la prevención podemos saber si el desarrollo de ambos es el correcto. Si no llevan un proceso extraño que se deje sin atender a edad temprana y repercuta como problema permanente al crecer el pequeño. El mejor tiempo para la prevención y corrección es a la edad temprana.
Otra medida de prevención para los pequeños en su salud bucodental es la educación en su alimentación, atender la dieta de los pequeños, velar porque esta sea una dieta sana que les aporte nutrientes suficientes para tener dientes fuertes y evitar en ella el excesivo consumo de azúcar, los alimentos azucarados son altamente cariogénicos, si podemos acostumbrar a los pequeños al azúcar de las frutas y verduras sería lo mejor. Cabe mencionar que el cepillado no se reduce en ningún tipo de alimentación, aunque algunos alimentos sean más cariogénicos que otros, lo más recomendable es el cepillado siempre después de comer.
Los bebés también requieren a su edad, limpieza, que la podemos hacer con una gasa húmeda, pasándole con delicadeza por las encías.
Hablar de prevención, es hablar de la aplicación a edad temprana de todas las enfermedades o deformaciones que afecten los dientes, incluyendo temporales y definitivos, las encías o maxilares en el futuro del niño.
