Autora: Jennyfer Wesly Camacho.
Manteniendo el compromiso latente de llevar asistencia médica y odontológica a poblaciones vulnerables, la Fundación Gotitas de Amor y Esperanza (GAE) realizó el pasado domingo 24 de abril el programa anual de Operativo Médico Odontológico SONRIE, brindando asistencia a 142 pacientes de los cuales, 66 fueron pediátricos y 23 geriátricos, los mencionados llevaban al menos 2 meses sin médico pasante en la UNAP de la comunidad de Sajanoa.
La asistencia médica y odontológica fue protagonizada por un excelente equipo de médicos, estudiantes de medicina, odontólogos y voluntarios de diferentes áreas, los cuales con inmenso amor y entusiasmo atendieron a cada paciente que acudió por servicios a la unidad. Agradecemos el compromiso social de donantes y colaboradores que se sumaron a la causa con medicamentos, material gastable, instrumentos médicos, alimentación e hidratación para el personal.
Por medio de este proyecto encontramos que los padecimientos más comunes se encontraron distintas patologías cronocidas como hipertensión arterial, afecciones cutáneas, intestinales y anemia. Todas estas condiciones prevenibles, lo que nos orienta a articular esfuerzos para más programas de promoción de la salud.
Sajanoa es una comunidad con grandes precariedades económicas, pero repleta de gente con gran corazón, humildad y bondad desde lo único que poseen. Nos llenaron de sonrisas, cariño y sus abrazos a todo el equipo que estuvo presente aquel domingo; en algunos casos compartiendo de los frutos que obtienen de la tierra como gratitud hacia los voluntarios que estuvieron sirviendo a la comunidad en la jornada ese día.
La fundación GAE nace de la necesidad de servicios de salud por parte de las comunidades de alta vulnerabilidad. Creemos en pequeños gestos que van cambiando el mundo, con la certeza de que el cambio depende a gran medida de las acciones de cada uno. Nuestro propósito en GAE es de recaudar, recolectar y redirigir recursos en RD a través de programas sostenibles con grupos y comunidades de alta fragilidad, en el área de salud, educación y el ambiente.
