Lorgis Geoeiddy De La Rosa German. Estudiante de Medicina de 4to año de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU). Oficial Local del Comité Permanente de Intercambio Profesional (SCOPE). Organización Dominicana de Estudiantes de Medicina (ODEM).geoeiddy@gmail.com
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es el problema respiratorio de mayor prevalencia e impacto socioeconómico en el mundo a pesar de ser una enfermedad potencialmente prevenible (1).
La EPOC se caracteriza por la obstrucción crónica y recurrente del flujo de aire en las vías respiratorias pulmonares. La obstrucción al flujo de aire suele ser progresiva y se acompaña de respuestas inflamatorias por la exposición a largo plazo a partículas nocivas o gases, en la mayoría de los casos del humo de cigarrillo (2), que puede estar o no acompañada de síntomas (disnea, tos y expectoración), exacerbaciones, efectos extra-pulmonares y enfermedades concomitantes (1).
La EPOC es una importante causa de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. Se considera que aproximadamente veinticuatro millones de estadounidenses tienen algún grado de EPOC y 12.1 millones se logran diagnosticar con EPOC (2). Es la cuarta causa de mortalidad en el mundo, y, se estima que en el 2020 será la tercera. Es la única enfermedad crónica cuya morbimortalidad mantiene un incremento sostenido (1).
Se estima que la causa más común de EPOC es el tabaquismo, evidenciado por el hecho de que el 80 al 85 por ciento de las personas con EPOC tiene antecedentes de uso de cigarrillo. Un segundo factor, pero en mucho menor frecuencia es una insuficiencia hereditaria de la proteína α1-antitripsina. Existen otros factores de predisposición que podrían desarrollar la EPOC como el asma y la hipersensibilidad de las vías respiratorias (2). El factor de riesgo con mayor importancia para la EPOC es el uso de cigarrillo por un largo plazo. A más años y más cigarrillos fumados, mayor es el riesgo. Los fumadores de pipa, cigarros y marihuana también pueden presentar riesgo, al igual que las personas expuestas a cantidades abundantes de humo de segunda mano, es decir, los que reciben el humo de manera pasiva pudieran desarrollar EPOC (3).
La EPOC aparece lentamente en un lapso de años, de modo que la mayoría de las personas tienen al menos 40 años cuando comienzan los síntomas. Los síntomas de la EPOC no suelen aparecer hasta cuando ya se ha producido un daño significativo y, por lo general, el daño es progresivo, sobre todo si el paciente sigue expuesto al humo del tabaco. Los pacientes con bronquitis crónica (causa que lleva a desarrollar EPOC al igual que el enfisema) presentan una tos diaria crónica, la cual puede ser transparente, blanca, amarilla o verdosa; producción de mucosidad (esputo) principalmente en las mañanas como síntoma principal durante al menos tres meses al año en dos años consecutivos. Otros síntomas y signos frecuentes son dificultad para respirar, presente durante la actividad física, silbido al respirar, presión en el pecho, color azul en los labios o los lechos ungueales (cianosis), infecciones respiratorias frecuentes y falta de energía (3). Es probable que los pacientes con EPOC tengan episodios llamados reagudizaciones, durante los cuales los síntomas empeoran más que la variación habitual diaria y duran al menos varios días empeorando todo su ciclo sobre todo si hay exposición a los factores que la exacerban como el humo del tabaco. La enfermedad también puede conllevar a daños cardíacos y lo más temible a cáncer de pulmón si no es controlada.
Aún no existe una cura para la EPOC lo que hace esta enfermedad lo que la hace peor. Sin embargo, cambios en el estilo de vida y tratamientos pueden ayudar a mejorar la respiración, a estar más activo y a retrasar el avance de la enfermedad, como dejar de fumar, evitar el humo de segunda mano, evitar infecciones respiratorias, administración de oxígenos, fármacos para mejorar el cuadro, rehabilitación pulmonar, entre otros (4). Ayudar al paciente al abandono del tabaco y a que comprenda él porque es la práctica más importante para lograr su mejoría y evitar reagudizaciones o recidivas constante, aunque esto sea lo más difícil para los pacientes fumadores de larga data.
Referencia bibliográfica
1. Asociación Latinoamericana de Tórax. Neumo-argentina.org. Hospital Universitario de Caracas. 2019 [Consultado el 25 de septiembre 2019]. Disponible en: http://www.neumo-argentina.org/images/guias_consensos/guiaalat_epoc_abril2011.pdf
2. Porth C, Grossman S. Fisiopatología. Enfermedad obstructiva crónica. 9th ed. España: Grupo Gen – Guanabara Koogan; 2014.
3. Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Síntomas y causas. Mayo Clinic. 2019. [Consultado el 26 de septiembre 2019]. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/copd/symptoms-causes/syc-20353679
4. El tabaquismo y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Enfermedades, Consejos de exfumadores. Consejos de exfumadores. 2019. [Consultado el 26 de septiembre 2019]. Disponible en: https://www.cdc.gov/tobacco/campaign/tips/spanish/enfermedades/tabaquismo-enfermedad-pulmonar-obstructiva-cronica.html
Referencia bibliográfica de imágenes
1. La Nación. EPOC, el verdugo de los fumadores. 2019. [Consultado el 26 de septiembre 2019]. Disponible en: https://www.lanacion.com.ar/sociedad/epoc-el-verdugo-de-los-fumadores-nid1745003
